miércoles, 9 de abril de 2014



LA SOMBRA
SIN FORMA


Amanece otro día, sin otro interés que la suma interminable de lo ya pasado.
ELLA, como tantos otros hijos del ayer, es una sombra sin una forma de la que nacer, sin una superficie sobre la que extenderse.
Con la creencia de que donde hay sombra espera la luz, todos los cuerpos están ocupados.
Vaga entre el marchitar de la caída y el desuso de lo roto
Todas, salvo ella, son el reflejo compacto, calmado y expectante de un cuerpo, con una dirección prohibida a la luz.
Son una rama injertada

El Sol sale para todos, es su recuerdo más arcaico aunque no logra dar tamaño ni cadencia a esa voz, que suena recreada en su interior.

Acogidas en una noche de penumbra, donde la luz le hace un guiño a las sombras, sin temor al menor atisbo de claridad y esa eterna carrera destinada a llegar juntas o entregarse el relevo, las escucho hablar de un hombre sin sombra, con una luz embotellada que parecía descorchada.
Sin dar normalidad a la diferencia, entre bromas y risitas le propusieron ir en su busca.
Una vieja sombra venerada por la veta y el negro degradado de sus años, por aquello de que las casualidades no existen, concreto que esa historia la ha escuchado casi desde el mismo tiempo en que ELLA apareció
Acallo las burlas, avergonzó a las presentes con la evidencia de la envidia cuando les mostró lo diferente y especial que ELLA era. Le aconsejo ir en busca de ese hombre y encontrar su destino, llegar al mar de lo común, el fin y el propósito de toda vida.

ELLA, pensó en un día sin esquinas, lo sintió, espero quieta al viento y cuando llegó, se marcho.

Lo que sabemos hoy es que aquel hombre murió, abandono el imposible de lo divino y humanizo su mensaje con la fragilidad y necesidad del cuerpo.
La sombra, su sombra, ELLA, con el signo de la suma doblo su forma y su huella, sin ángulos que la distorsionan, acredito que nunca estamos solos.
He tocado un musgo aferrado al tronco que lo sustenta, era de un verde joven y aterciopelado. He mirado mi sombra de un negro orgulloso, distinguido, evidenciando su oscuridad, nacida de un sólido cuerpo entre la intensa luz

La he sentido honrada y fiel.

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